En un país como España, donde prevalece la propiedad de la vivienda, la palabra Euríbor cobra especial importancia y relevancia para la ciudadanía. Pero, ¿qué es? ¿Cómo se calcula? ¿Cómo incide en nuestras hipotecas? El comparador financieroy de créditos rápidos WannaCash.es lo explica a continuación.
El Euríbor (acrónimo de Europe Interbank Offered Rate, o Tipo europeo de oferta interbancaria en español) es el interés aplicado a las operaciones entre bancos de Europa, es decir, el porcentaje que paga como tasa un banco cuando otro le presta dinero. Y, habitualmente, es el índice de referencia usado para calcular los tipos de interés de los préstamos hipotecarios. Desde el año 2016 el grupo de bancos que comunican el tipo de interés interbancario pasó a ser de 23, de los cuales 4 son españoles (BBVA, Santander, Caixabank y Cecabank).
La forma de calcular el Euríbor es muy sencillo: todos los días laborables se solicita a cada uno de los bancos que envíe sus tipos de interés. Una vez se tienen todos los valores, se elimina el 15% más alto y el 15% más bajo de los tipos de interés recogidos y se realiza la media aritmética del resto. El resultado siempre irá a tres decimales.
Entonces, si el Euríbor está en negativo, ¿por qué sigues pagándole al banco? Porque los bancos, cuando conceden una hipoteca a interés variable -los más comunes-, también le añaden un diferencial. Por lo tanto, si aplicamos la media provisional del mes de septiembre del Euríbor (-0,165) y el diferencial de tu hipoteca (1%, por ejemplo), al final se te aplicaría un 0,835% de intereses. Es por ello que durante estos años de recesión y con el Euríbor en números negativos, los diferenciales aplicados por los bancos han sido mayores.
Sin embargo, hay que tener en cuenta un aspecto importante y que en ocasiones se ignora: qué mes se tiene la revisión, que por contrato suele estar fijada una o dos veces al año. Así, si la revisión la tienes en octubre, se te aplicará el interés mensual del mes de septiembre y nunca el de otro mes, aunque te resulte más beneficioso.
Antes de adentrarte a firmar un préstamo hipotecario, ten claro lo que implica un interés hipotecario variable y un interés fijo y, en definitiva, si puedes afrontar cambios constantes en la cuota de tu hipoteca, puesto que suele haber grandes fluctuaciones entre meses. Porque, aunque desde un punto de vista histórico las personas que se decantan por un interés fijo terminan pagando menos, esto no siempre es así y dependerá de la situación económica y financiera del país y la Unión Europea. Y eso no es fácil de prever.