Un análisis del uso de Tinder entre los hombres de Manchester and Cheshire, por parte de la Dra Jenny van Hooff de Manchester Metropolitan University, mostró que los sujetos se sentían “traicionados” cuando la representación digital de alguna de sus citas no correspondía con la realidad. En algunos casos, los hombres se creían con derecho de tener sexo casual para compensar el “abuso de confianza”.
“Algunos de nuestros encuestados consideraron que este abuso de confianza confianza era una licencia para utilizar a su cita a su antojo, acelerando la intimidad y socavándola al mismo tiempo.”
Algunos ejemplos de lo que los participantes comentaron:
“He sido muy engañado por fotografías muy selectivas, ángulos en los que la persona no es tan atractiva o delgada o deportiva como lo hacen parecer en las fotografías. Trato de evitarlo si es posible, o de obtener algo de ello.”
“Estoy buscando una relación a largo plazo, pero en después de segundos de conocer a alguien puedes saber si eso va a pasar. Así que, si pienso que hay una posibilidad de tener sexo, la tomaré. Muchas chicas ponen ‘no aventuras de una noche’ en sus perfiles, pero aún así las tienen. Tinder realmente me ha endurecido.”
“Lo que diré es que es natural que los humanos se aprovechen unos de otros, y Tinder no ha cambiado esto, sino que lo ha hecho más fácil.”
“Es Tinder. Yo diría que tus posibilidades de tener sexo aumentan si la chica ha mentido en su perfil.”
“La fui a conocer a un bar en Northern Quarter y pude ver que era realmente gorda. Si hubiera sido la clase de bar en el que me pudiera haber levantado e ido, lo hubiera hecho, pero me quedé atrapado ahí.”
De acuerdo al estudio, aunque “todos” los que utilizan este tipo de aplicaciones consideran que están siendo honestos, están presentando la mejor “versión trabajada” de sí mismos. Aunque también participan en ese juego, los hombres encuestados expresaron que se sentían “traicionados” y eso les daba libertad de disponer de su cita a su antojo.
“La investigación encontró que en muchos aspectos, las aplicaciones de citas parecen acentuar normas de género tradicionales, en lugar de proveer un espacio libre de las amplias desigualdades de género.
